SONETO A MIS RAÍCES
Nunca rememoré tanto el pasado.
Yo que nunca cuidé de mis raíces;
Se quemaron al Sol, las infelices;
Ya tarde solicito su cuidado.
Solas en su abandono han batallado.
Orgullosas se sienten hoy, felices;
De mostrar retorcidas cicatrices;
Fruto de mi desprecio y mi pecado.
Arrepentido estoy, es evidente.
No merezco perdón, y no lo pido.
Sólo quiero expresarlo humildemente.
Ahora resta paciencia y buen sentido.
El tiempo todo borra, ciertamente.
La mejor medicina es el olvido.
VICTORIANO ORTS COBOS
Hay un tiempo para todo...para olvidar y para rescatar del olvido.
ResponderEliminarSobre todo cuando la expresión de ese olvido y de ese rescate se manifiesta de una forma tan hermosa...
Voy a ponerme al día con tus escritos...todo un placer.
Besos Victoriano
Gracias Loli por tus 7 comentarios.
ResponderEliminar¡nada menos que 7!
Echaba de menos tu presencia en mi blog. Es para mí una inyección de vitalidad y firmeza que me anima en mi quehacer diario y me fortalece en mis inquietudes literarias.
Dices que vas a ponerte al día en mis escritos. Te lo agradezco, pero te agradecería aún más que te pusieras al día en los tuyos, para poder disfrutar DE ellos.
Gracias nuevamente.
Vi8ctoriano.