CUARTO Y ÚLTIMO, D.M-D.
DOLORES MURIANO DOMÍNGUEZ
MUJERES POETAS XXI.
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Llegó a nosotros hace tres años pidiendo trabajo para ella y posibles para sus hijos. La tristeza y preocupación era evidente en su rostro. Aunque intentaba disimularlo en principio por miedo a ser rechazada, no había manera de ocultar la realidad de que lo estaba pasando mal. Desde entonces, compartimos trabajo, posibles y solidaridad. Posibles los justos, escasos, pero suficientes. Trabajo y solidaridad, todo.
Lleva la poesía dentro de su ser. Sale de su mente a borbotones, como una catarata incontrolada; salvajemente pura. “-Tienes que beber de su agua con moderación porque de lo contrario corres el riesgo de atragantarte y transformar ese líquido sincero doliente y espontáneo en lágrimas.”- No corrige nunca. No lee prácticamente nada. Yo le aconsejo que frene su ímpetu, lime su verso y lea mucho. Trabajo le cuesta, pero, lo va consiguiendo. Por intuición, lo escribe prácticamente todo en cuartetos con rima parcial encadenada en los versos segundo y cuarto, buscando siempre el sonido melódico aunque el contenido de la estrofa sea contradictorio.
Tres poemas he seleccionado para el final de este homenaje. Ambos actuales. El primero, largo y repetitivo como es normal en esta “escritora compulsiva” El segundo, a petición mía, he conseguido que sea súper concentrado. El tercero me ha sorprendido admirativamente. Se lo dedica a mi mujer, Ana-María, (Iti) Me cuenta, y yo la creo, que lo compuso en la misma tarde del día veintiséis de julio de 2010, día de Santa Ana, y me admira por partida doble porque en este poema se sale de su rutina y me sorprende con estrofas en cuartetos encadenados, (ac/bd) cuyos versos riman todos, el primero con el tercero y el segundo con el cuarto, cosa totalmente nueva para ella y que yo considero de gran dificultad. En los dos anteriores, al igual que en el último, en todos ellos, se puede constatar el avance ortográfico que ha experimentado Dolores en estos últimos años. Esto tiene su explicación en el hecho de que atiende consejos y además se encarga de ayudar a sus hijos a repasar los ejercicios de sus estudios, con lo cual, ella también aprende.
Sinceramente creo, estoy seguro, que dentro de unos años esta mujer habrá perfeccionado su poesía. Porque tengo fe en ella, le he hecho un lugar preferente dedicándole cuatro capítulos, en lugar de uno sólo que dedico a todas las demás en este blog.
V.O.C.
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Pero fue un sueño maravilloso
Era libre, libre como el aire,
Todo era bello, precioso.
De arena blanca, mar serena
El sol subía hacia el infinito
Y alguien estaba a mi vera.
Se agarraba a mi cintura,
Me acariciaba, me besaba,
Me trataba con tanta ternura…
Todo parecía tan real, tan bonito,
Nos tumbamos a la orilla del mar,
Las olas nos acariciaban,
Aquello era paz y felicidad.
Abrazaba mi cuerpo, me acariciaba,
Tocaba mi piel con tanta delicadeza,
Besaba mis labios con tanta pasión…
Acariciaba mi piel de los pies a la cabeza.
La noche cayó sobre nuestros cuerpos,
Una luna hermosa y brillante
Nos miraba, las estrellas el mar,
Eran testigos de nuestras caricias constantes.
Yo me sentía feliz, muy feliz,
Porque él me amó tan apasionadamente,
Que aún quisiera estar soñando
Toda la vida, eternamente.
Solo se oía en la noche de luna llena,
El sonido de las olas, nuestros suspiros de amor,
Los pájaros revoloteando sobre nuestros cuerpos,
El viento que nos traía los pétalos de una flor.
Pétalos que cubrieron nuestros cuerpos,
Desnudos bajo la luna llena y las estrellas,
Una música que a lo lejos sonaba
No sé de donde, pero era una melodía, tan bella.
Sigue amándome así por favor
Dame amor en esta preciosa playa,
Toma mi cuerpo, mi alma mi vida,
Toma todo mi ser y, calla, calla.
Éramos dos en uno y la noche,
La luna, las estrellas, el mar el viento,
Éramos poesía entre las olas,
Éramos dos apasionados aprovechando el momento.
¡Cuánto amor sentí anoche en la playa,
Abrazada entre tu cuerpo de barón
Entre las caricias de tus manos,
Que se llevaron mi corazón!
DOLORES MUERIANO DOMÍNGUEZ.
Personas a las que yo quiero.
DOLORES MURIANO DOMÍNGUEZ
Que deambulaba por una ciudad,
Donde caminando y andando sin saber,,
Encontró a Iti, pureza y sinceridad.
Abrió las puertas de su corazón,
A tres corderos medio perdidos,
A los que ella, sus vidas llenó de ilusión,
Y tanto y tanto cariño nos ha ofrecido.
Aumentó su familia sin parir
En este cuento un poco extraño,
Pero gracias al encontrarte a ti
Mi vida va cambiando con los años.
Vivimos en un castillo de cariño,
Nos llenas de paz, ternura y amor,
Eres madre para mí, abuela para mis niños
Tienes la mejor fragancia que jamás tuvo una flor.
Eres un cuento hermoso, verdadero,
Donde reina la amistad, la compañía,
Y mi segunda madre te considero,
Y quiero que sepas, que te tengo en el alma mía.
Esta noche frente al mar, frente a la luna,
Con el cielo cubierto de luceros y estrellas.
Tengo que decirte, que como tú, no hay ninguna,
Que eres de todas esas constelaciones la más bella.
Siempre quiero estar a tu lado,
Ofreciéndote mi amistad, mi cariño,
Eres para nosotros, el mejor de los regalos,
Para esta madre y sus niños.
Un cuento para ti, preciosa,
La reina del más hermoso jardín,
Porque no hay una flor más hermosa,
Porque sin esta rosa yo no sabría vivir.
DOLORES MURIANO DOMÍNGUEZ.
Málaga 26 de julio de2010.
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(Re)leído con fecha 31 de agosto de 2016, sin alterar en nada su contenido inicial de fecha 4 de septiembre de 2012.
