martes, 6 de junio de 2017

DIOS LO QUIERA
Por PEDRO MORENO BRENES, Diario SUR. Domingo 04, 06, l7.
No luchar contra el cambio climático es una indecencia moral respecto a las futuras generaciones
     Esto del  cambio climático no es un capricho de sofisticados ociosos y ajenos al mundo real. Hay consenso en la comunidad científica de que esta lacra conlleva riesgos para las personas y no caben soluciones parciales, esto es cosa de todas las criaturas que habitamos la tierra. Dicen los que entienden que el calentamiento global lo provocan los gases de efecto invernadero, el dióxido de carbono y otros compuestos químicos como el metano o el dióxido de nitrógeno; por tanto, para paliar las consecuencias del cambio climático hay que reducir las emisiones contaminantes. Apelar a razones económicas y de empleo para hacerse el sueco y no hacer nada es una indecencia moral respecto a las futuras generaciones y además constituye una rotunda mentira.
     Y como de mentirosos anda la cosa, aparece el personaje de todas las salsas. Donald Trump. Este sujeto, un histrión autoritario, machista, racista, defraudador vocacional y desde luego un enorme bocazas, ganó las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Aún recuerdo a un lector de los que otorga certificados de `revolucionario´, que al hilo de las críticas de un servidor a tan nefasta expresión del género humano, apelaba a que no me enteraba, ¡Trump era un antisistema!, había que darle una oportunidad, como al `platanito´. En fin, que el mal bicho que se burlaba de un periodista crítico que padece artrogriposis y que en mala hora los electores han colocado de presidente de EE UU, dijo el pasado jueves que su país se sale del Acuerdo Climático de París, y lo hace porque puede llevar a importantes pérdidas económicas a la economía de EE UU. Sin embargo, los tiros van por otro lado, las mayores empresas estadounidenses son conscientes de que la reputación es un activo esencial y que medidas como esta afectarán a sus cuotas de mercado; asimismo, las grandes energéticas han pedido al presidente que se mantenga dentro del Acuerdo. En cuanto al empleo, es muy significativo que Richard Trumka, presidente de AFLCIO, el mayor sindicato de la nación, ha dicho que “salir del cuerdo de París significa abandonar un futuro más limpio con mejores empleos para el país. Es una decisión que no solo pone en peligro el medio ambiente, sino que nos aísla del resto del mundo”. No es la economía, es la idea de algunos de que EE UU es el amo del mundo, lo que permite a su presidente, un tipo maleducado desde siempre, a dar empujones a cualquiera que le moleste, incluso manu militari como pudimos ver en la reciente cumbre de la OTAN.
     Seamos optimistas. El Acuerdo de París continúa en vigor ya que lo han ratificado un número suficiente de países; la Unión Europea, China e India reiteran su firme propósito de mantener sus compromisos ambientales y la salida de EE UU del Acuerdo de París no será efectiva hasta 2020, coincidiendo con el final del mandato de Trump. Dios lo quiera.
*****************************
Copiado por Victoriano Orts Cobos.
Málaga 6 de junio de 2017.     


No hay comentarios: