Otro sistema solar a tiro de piedra
Científicos de la Universidad de Granada y la de Liege, en Bélgica, descubren que Luyten, una de las estrellas más cercanas a la Tierra, podría albergar vida
Encontrar vida más allá de nuestro planeta es una de las obsesiones de la ciencia y también tema recurrente en las obras de ciencia ficción. Por eso, cada vez que unos científicos apuntan a la posibilidad de que un astro, situado a millones de kilómetros de la Tierra, cuente con las condiciones necesarias para albergar vida extraterrestre, el hallazgo salta a las páginas de todos los diarios.
Esta vez han sido Francisco J. Pozuelos, investigador de la Universidad de Liege, en Bélgica, y Juan Carlos Suárez, científico de la Universidad de Granada, los que han descubierto que la estrella GJ 273, más conocida como Luyten y una de las más cercanas a la Tierra -se encuentra a 12,23 años luz-, alberga un sistema planetario tan complejo como el nuestro, que podría estar en condiciones de ofrecer un buen sustento a la vida.
En un artículo publicado en la revista 'Astronomy & Astrophysics', los investigadores señalan que el sistema, el cuarto más cercano al Sol, podría estar formado por múltiples planetas, reservorios de cuerpos menores, «e incluso podría albergar agua, a raíz de las estadísticas y las simulaciones que hemos realizado, aunque no tengamos todavía otras evidencias directas», explica Francisco J. Pozuelos, autor principal de la publicación.
En torno a Luyten, una estrella enana M, orbitan al menos dos planetas, denominados GJ 273b y GJ 273c, pero existe la posibilidad de que existan otros dos, GJ 273d y GJ 273e. Según los autores del trabajo, el análisis dinámico global, incluyendo a estos dos planetas candidatos, «hacen que el sistema sea altamente estable y, por tanto, muy probable».
De los planetas ya confirmados, GJ 273c tiene una masa similar a la de la Tierra, mientras que GJ 273b sería una súper-Tierra. Es precisamente ésta la más interesante ya que su órbita se encuentra cerca del borde interior de la zona de habitabilidad de su estrella anfitriona. De hecho, sufre un calentamiento por mareas, un fenómeno idéntico al de la Tierra por la interacción gravitatoria con la Luna y el Sol. «El calentamiento por mareas hace de GJ 273b un planeta altamente interesante, puesto que esto lo hace compatible con el desarrollo y la existencia de una biosfera», señala Juan Carlos Suárez.
No es la única similitud con nuestro sistema solar. Y es que los investigadores están convencidos de la presencia de depósitos de cuerpos menores, asteroides como los que se encuentran en el cinturón entre Marte y Júpiter. Asteroides cuyo impacto en la presencia de agua o la producción de productos orgánicos podría ser importante. De ser así, podrían desempeñar un importante y crucial papel en la aparición y mantenimiento de la vida en el GJ 273b.
************************************
Publicado en Diario SUR.
Copiado/pegado de Internet por Victoriano Orts Cobos.
Málaga 10 de julio de 2020.
************************************************************************************************************************************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario